Quisiera volverte a ver,
pero no lo sé porque mis años quizá ya no me permitan volver a verte.1
Parras, Coahuila a 24 de enero de 2022
Nuestra demanda de encontrar a Toño y Toñín se mantiene a pesar del tiempo y de los obstáculos a los que nos hemos enfrentado. Nuestro mensaje permanente es para ellos, para decirles que les seguimos buscando y que no les olvidamos. La exigencia al Estado, aunque se hace a un Estado que se ha mostrado como criminal y omiso, la mantenemos para no olvidar y no dejar de señalar que son responsables.
Han pasado trece años desde que autoridades en colusión con los Zetas desaparecieron a Antonio Verástegui González y a su hijo Antonio de Jesús Verástegui Escobedo. Trece años de una tortura permanente en los que no hay un día sin que nos preguntemos ¿Dónde están? Y que, a pesar de la complicidad e incapacidad de las autoridades, no perdemos la esperanza de tenerlos de regreso en casa.
No imaginamos que la ausencia de Toño y Toñín se contara en años y el cansancio cada año es más aplastante. A pesar de ello, nos mantenemos con la esperanza de que un día ellos estarán en nuestra casa a donde pertenecen.
Agradecemos a todas las personas que a lo largo de estos trece años nos han acompañado en nuestra búsqueda incansable. Les abrazamos esperanzados que un día reciban el mensaje que Toño y Toñín están de regreso a casa.
Atentamente
Familia Verástegui González
Responsable de la publicación: Jorge Verástegui González
1 Carta de Guadalupe González Escobar dirigida a su hijo Antonio Verástegui González, publicada en Memoria de un corazón ausente. Historias de vida (2018), Fundación Heinrich Böll-México y El Caribe. Disponible en: http://mx.boell.org/es/2018/05/09/memoria-de-un-corazon-ausente-historias-de-vida